Recuerdo que cuando era más chica, comprar pan integral, comer comida light era poco común y por ende, mucho más caro. De un tiempo hasta ahora, este tipo de productos están al alcance de la mayoría de los bolsillos, incluso las marcas de supermercados los ofrecen.
Junto con el boom de estos productos, no podía faltar la propaganda. Es interesante observar como se repiten los mismo valores en este tipo de propaganda. La vida sana, la belleza natural, la asociación entre delgado y feliz, el escape del trabajador; la pausa.
Siempre utilizan los colores sobre expuestos a la luz, claros, tonos pasteles y personas con la tez blanca.
El comercial de los nuevo pancitos de TWISTOS no escapa a este tipo de formato. Sin embargo es una mutación más avanzada del cliché del producto natural. Veámoslo.
Este comercial, tiene versiones diferentes dependiendo del país. Osea, lo que dice el pajarito, cambia.
En este caso, no son inusuales las palabras que pronuncia. De alguna manera, quedan ilustradas las preocupaciones diarias de una mujer "moderna". Ahora no está cansada de lavar ropa, pero ojo, tampoco por trabajar.
Lo que le preocupa son temas morales, el tener que modificarse a ciertos estandares que la sociedad pide, aun que sean más "modernos".
La retórica aquí es : "si comes twistos, un break natural no tendrás que preocuparte de hacerte la cirugia, sino que puedes comer igual".
Nos causa gracia este comercial por lo creativo y sobre todo, por lo real de las preocupaciones que manifiesta el pajarito carpintero. Sin embargo, el producto ofrecido no es la solución a esos temores, sino una ilusión de escape.
¡De todos modos me encanta este comercial! logra su objetivo
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